Cada vez son más los pacientes que optan por una ortodoncia más estética, pero aún son muchos los pacientes que tienen ciertos conceptos erróneos acerca de estas técnicas de ortodoncia invisible.
Es el caso de pacientes que llegan preguntando: ¿Es molesta o incómoda la ortodoncia lingual? ¿Produce aftas? ¿Dificulta el habla? ¿Son muy pocos los casos que se pueden tratar con ortodoncia invisible? ¿Es el tratamiento mucho más largo que con brackets? Entre muchas otras preguntas que podríamos listar.
Antes de responder a estas interrogantes es necesario aclarar que cada caso tendrá particularidades diferentes, tanto bucodentales así como las necesidades propias del paciente. También hay que tomar en cuenta el nivel de especialización, experiencia y compromiso del ortodoncista antes de juzgar un técnica en particular.
De igual forma es importante resaltar que no todas las técnicas de ortodoncia invisible son iguales ni proporcionan los mismos resultados. Actualmente, el sistema Invisalign es pionero en ortodoncia plástica transparente.
Cada boca es un mundo
Antes de decidirse por un tipo de tratamiento u otro, conviene realizar una valoración por parte de un ortodoncista correctamente formado y con experiencia en estas técnicas, ya que el desconocimiento de las mismas podrá derivar en información errónea al paciente como: “Invisalign solo sirve para casos sencillos”, “los dientes no se alinean igual”, o “su coste es muy elevado”, entre otras cuestiones.
No todos los ortodoncistas están certificados en las técnicas de la ortodoncia lingual Incognito o Invisalign, porque son técnicas que requieren de una inversión en formación continua significativa para el ortodoncista. Es por ello que decimos que no da lo mismo ser valorado por cualquier ortodoncista.
Un profesional correctamente capacitado que trabaje continuamente aplicando estas técnicas, podrá enseñarte casos de éxito, contextualizados en la experiencia de pacientes que haya tenido. Con ello lo que queremos decir, es que la ortodoncia lingual Incognito e Invisalign no son técnicas experimentales, sino técnicas probadas y que funcionan.
Factores a tomar en cuenta con la ortodoncia invisible
Como bien decíamos cada paciente tiene necesidades específicas, resulta crucial que entre paciente y ortodoncista revisen a fondo los siguientes factores: estética, precisión, comodidad, urgencias, higiene, tiempo de tratamiento y precio.
En la actualidad, ambas técnicas son altamente precisas ya que su evolución está planificada por ordenador, y al ser vigiladas de cerca por el ortodoncista, los porcentajes de éxito son verdaderamente favorables. Gracias a ello, con ambas se pueden tratar casi todas las maloclusiones.
En materia de comodidad, el hecho de que Invisalign sea removible le confiere ciertas ventajas, entre ellas poder retirar los alineadores durante las comidas y el cepillado. Por otro lado, el periodo de molestias que puede dar la ortodoncia lingual no ha de ser mayor a dos semanas, eso sí, requiere mayores cuidados en cuanto al cepillado.
Con Invisalign no se presenta ningún tipo de complicaciones salvo que se te pierda la férula, lo contrario de la ortodoncia lingual, que al caerse un bracket o soltarse un alambre puede causarte molestias.
En materia de precio y tiempo, la ortodoncia invisible al basarse en la última tecnología, es más costosa en comparación con la ortodoncia metálica convencional. Sin embargo, dependiendo de la complejidad del caso el precio puede variar, además los alineadores transparentes tienen un coste similar a los brackets cerámicos estéticos.
Debido a la composición y exclusividad de los brackets de la ortodoncia lingual, los cuales son personalizados y solo son válidos para un paciente en concreto, su precio es mayor. En el costo también influye que la duración de la revisión en gabinete requiere más tiempo, por la complejidad de esta técnica.