Visitar al dentista es parte imprescindible del cuidado de nuestra salud dental, y deberías hacerlo como mínimo dos veces al año aunque no presentes ninguna dolencia bucodental que te obligue a ir antes. La duda surge cuando no tienes ningún síntoma de mayor envergadura, quizá simples y ligeras molestias a las que no prestas mucha atención, pero ten cuidado, porque podrían convertirse en verdaderas complicaciones que tratadas a tiempo, no habrían supuesto más que una simple visita a tu odontólogo de confianza.
¿Qué síntomas indican que debería visitar al dentista?
Dolores dentales
Ahora bien, el dolor de muelas se debe a menudo a un absceso o rotura, la cual debe ser tratada con inmediatez, única y exclusivamente por el profesional dental, para que los dolores no pasen a mayores y los daños en la pieza dental puedan tratarse. También podría deberse a la erupción de las muelas del juicio o cordales, que a cierta edad y dependiendo del caso, pueden ocasionar fuertes dolores, y de igual forma sólo el profesional dental podrá dar una valoración objetiva sobre si se debe o no extraer.
Sensibilidad en los dientes
En este punto la visita al odontólogo ya no resulta tan evidente como en el anterior, de hecho, un 60 por ciento de la población española padece de sensibilidad dental según el estudio ‘Colgate Sensitive sobre los Españoles y el Dolor‘, avalado por la Sociedad Española del Dolor, y sólo una pequeña parte decide actuar en consecuencia.
Esta sensibilidad podría indicar caries, dientes fracturados, problemas de encías, desgaste del esmalte dental o raíces dentales expuestas por recesiones de las encías. En cualquiera de los casos, sólo el odontólogo puede indicarte el tratamiento a seguir.
Encías inflamadas o sangrantes
Ante una mala higiene dental se puede generar sarro, producto de la acumulación de placa bacteriana en los dientes, provocando la inflamación y sangrado de las encías, que no es más que una gingivitis, la cual puede ser fácilmente corregida a través de una limpieza dental por parte del odontólogo o higienista y una buena higiene dental. Si no se le presta la atención requerida, podrá derivar en una periodontitis con serias consecuencias en tu salud bucodental.
Halitosis o mal aliento
Dolor de cabeza o mandíbula
Aunque pueda parecer que no tienen nada que ver con problemas de salud bucodental, algunos dolores de cabeza, tensión muscular en el área de la mandíbula, e incluso problemas de sueño, se deben a una afección denominada bruxismo. Pese a que pueda no sonarte de nada, más del 20% de la población lo padece, y su origen está en apretar los dientes de forma inconsciente e involuntaria. En este caso, el odontólogo probablemente te trate mediante una férula de descarga y terapias fisioterapéuticas.
Como habrás podido comprobar, muchos de estos síntomas no te habrían indicado, probablemente, que tienes que ver a tu odontólogo, pero resulta de mucha ayuda saber reconocerlos y acudir al dentista en caso de que se produzcan, antes de que puedan surgir más complicaciones y debas visitar al dentista en más ocasiones.