Es bien sabido que fumar trae una gran cantidad de consecuencias devastadoras para nuestra salud, algunas muy graves, otras no tanto. En esta ocasión, hablaremos de cómo afecta a la salud bucal el caso particular de las manchas de color oscuro que aparecen en la boca del fumador, que bien pueden ser producto de una melanosis o algo aún más preocupante.
La melanosis relacionada con tabaquismo es asintomática, es decir, el paciente no presenta ningún dolor o molestia, simplemente se manifiesta por el cambio de tonalidad en la mucosa oral. Esta patología afecta a un 30% de los fumadores, y en el caso de las mujeres que están en un tratamiento anticonceptivo, el porcentaje de afectadas es aún mayor.
¿Es maligna?
La respuesta es NO. La melanosis del fumador, como también se le conoce, no resulta maligna en principio, de hecho es reversible. La cura es realmente sencilla, con que el fumador deje de fumar será suficiente. Transcurrido un año o incluso sólo algunos meses, las manchas ya habrán mejorado notablemente.
El origen de este cambio en la pigmentación bucal no está vinculado a medicamentos o a predisposición genética, sino específicamente al consumo del tabaco. Sucede que ciertos componentes del tabaco como la nicotina, estimulan a los melanocitos (células encargadas de establecer el tono de nuestra piel y protegernos de los rayos uv) a producir más melanina.
El diagnóstico diferenciado
El problema de la melanosis del fumador es que puede enmascarar otras afecciones mucho más graves. Como ya establecimos antes, ésta es benigna, pero recordemos que fumar es uno de los mayores causantes del cáncer bucal, el cual también manifiesta cambios de pigmentación en la mucosa de la boca.
Tomar una biopsia para descartar que la mucosa afectada no sea maligna es una opción a tener en cuenta, ya que en estos casos de alteraciones melánicas, un diagnóstico acertado puede salvar la vida del paciente. Cabe destacar que el cáncer bucal no es el único cuadro con el que se podría confundir la melanosis del fumador.
Lesiones vasculares (varices, hemangiomas y hematomas), lesiones melanocíticas tanto malignas como benignas no relacionadas al tabaquismo, y otros como el síndrome de Albright, la enfermedad de Addison, el síndrome de Peutz-Jeghers o la enfermedad de Recklinghausen, podrían ser los causantes de la alteración en la pigmentación de la mucosa bucal.
Tomar conciencia: la mejor arma para erradicar la melanosis del fumador
Con todo lo expuesto, queda claro que si eres fumador, lo mejor que puedes hacer por tu propio bien es dejarlo, ya que el posible precio a pagar por continuar con el vicio es muy alto. En cualquiera de los casos, fumador o exfumador, las visitas a tu dentista de confianza no pueden faltar, ya que un diagnóstico acertado y temprano puede resultar crucial.